La abstención debe ser una voz clara en estas votaciones del próximo domingo 26 de marzo.
Votar en Cuba es un derecho, no una obligación. Nadie tiene derecho a obligarnos a votar ni a que votemos de una manera específica.
Abstenerse también es una expresión y una acción, legitima y legal.
La abstención debe ser una voz clara en estas votaciones del próximo domingo 26 de marzo. No podemos apoyar un sistema que impone por la fuerza su ideología monolítica, restrictiva y discriminatoria de quienes reclaman derechos legítimos.
La falta de transparencia y la caótica gestión del Gobierno se sumarán al manejo de los resultados de estos comicios. Pero ello no debilitará el efecto de nuestro voto a favor de una población que quiere vivir en libertad, prosperidad y concordia.
Yo me abstendré este domingo 26 de marzo.
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